Un estudio de la Universidad de Loma Linda en California, Estados Unidos encontró que las personas que consumen de forma frecuente frutos secos, reducen el riesgo de tener obesidad síndrome metabólico.
Los resultados de la investigación se publicaron en la revista Plos One. Participaron en la misma 803 adultos que ingerieron entre 16 gramos y 5 gramos al día de frutos secos.
Son frutos secos las almendras, nueces de Brasil, anacardos, avellanas, nueces de macadamia, pacanas, pistaches y nueces.
La autora principal del estudio, Karen Jaceldo-Siegl señala que se encontró que una ración de frutos secos (unos 28 gramos) a la semana, se asoció significativamente con un 7% menos de riesgo de padecer síndrome metabólico. Doblar ese consumo, ayudaría a reducirlo en 14%.
Presentar al menos tres de los siguientes cinco factores, pueden dar como resultado un diagnóstico de síndrome metabólico: obesidad abdominal, triglicéridos altos, colesterol HDL (bueno) bajo, presión arterial alta e hiperglucemia.
Una persona con síndrome metabólico tiene el doble riesgo de enfermedad cardiovascular y cinco veces más posibilidades de padecer diabetes tipo2.
Los investigadores también comprobaron que grandes consumidores de frutos secos tenían una prevalencia menos de obesidad al compararlos con los que consumían menos.
Esta investigación sobre los beneficios de la ingesta de frutos secos, replica los resultados del mayor estudio que se ha hecho sobre el tema (participaron 120 mil personas) y que se publicó en diciembre de 2013 en la revista The New England Journal of Medicine.
El trabajo explica que las personas que comen nueces a diario, tienen un 20 por ciento menos de probabiliades de morir por cualquier causa en un periodo de 30 años, en comparación con las que no consumían frutos secos.
Fuente: http://www.sumedico.com/nota17137.html