La avena comenzó a cultivarse hace más de 4000 años en Europa. Es una planta anual que se siembra en otoño y primavera. A pesar de que sus tallos y hojas son delgadas y parecen frágiles, la planta es muy resistente a las fuertes lluvias y a las bajas temperaturas y la semilla es invulnerable ante la mayoría de las pestes que atacan otro tipo de semillas.
La avena pasa por un proceso antes de que pueda consumirse. La cáscara con la que está cubierta la avena que consumimos es muy dura y debe eliminarse. Una vez que la cáscara se elimina el producto resultante tiene nombre de avena mondada. Esta semilla es expuesta al calor para evitar que se eche a perder y posteriormente se corta en piezas pequeñas.
Posteriormente la avena es cortada con forma de hojuelas y cocida al vapor para elaborar hojuelas de avena, y si se pretende obtener salvado de avena, la avena mondada se muele en vez de pasar por el proceso anterior; también se muele para obtener harina de avena, aunque el proceso de molienda es más extenso.
Para qué sirve la avena
La avena no fue un alimento muy popular durante mucho tiempo, en realidad se consideraba una comida de las clases bajas. Hoy en día, la realidad es completamente distinta, la avena es percibida como un alimento excelente para la salud.
Una de las propiedades de la avena es el calcio que ayuda a fortalecer huesos y dientes.
La avena posee una gran cantidad de vitaminas y minerales.
La avena contiene una alta cantidad de fibra, la cual favorece a la digestión y aporta muchos más beneficios.
Uno de los beneficios de la avena es que prácticamente no contiene grasa.
La avena también contiene muchas proteínas.
Fuente: http://salud.ellasabe.com/plantas-medicinales/136-avena-propiedades-y-beneficios