Lavanda aliada en la cosmética


Muchas son las propiedades de esta planta de aroma fresco e intenso. Benefíciate de ellas a través de la piel y del olfato, potenciando tu belleza y mejorando tu ánimo.

Los aromas fueron lo primeros en perfumarse con esta bella planta. Con los años se ha afianzado con fragancia para elaborar colonias y su aceite esencial, de efecto tranquilizante, se emplea en muchas fórmulas cosméticas.

La lavanda crece en las zonas montañosas del área mediterránea, pero debido a su gran uso en fitoterapia también se cultiva en Francia y Bulgaria. Florece en verano y sus brotes, de color azul violáceo, se agrupan en espigas que desprenden un intenso aroma.

 
FLOR DE MULTIPLES VIRTUDES

-Esta planta es un potente reparador celular y calmante, capaz de combatir el envejecimiento y la celulitis.
-Posee un gran poder cicatrizante.
-Se usa para tratar alergias, quemaduras, cabellos debilitados y acné, ya que equilibra las pieles grasas.
-Es antiséptica y sedativa, por lo que favorece el sueño y alivia las jaquecas.
-Además actúa como relajante, refrescante y antidepresivo, ayudando a superar estados emocionales críticos.

 
UN ACEITE MUY APRECIADO

Es en esta preparación, como aceite esencial, donde se concentran sus principales virtudes. Resulta especialmente útil, por ejemplo, para tratar las picaduras o repeler los insectos. Sin embargo, éstas son sólo algunas de sus aplicaciones posibles. De hecho la lavanda es uno de los ingredientes naturales más utilizados en cosmética.

En su gran mayoría los aceites deben ser diluidos o rebajados para no dañar la piel durante los tratamientos o masajes. Pero el destilado de lavanda puede utilizarse puro, pues sus propiedades limpiadoras y desinfectantes ayudan a mejorar el estado de la dermis. Es por esta misma razón que este aceite admite ser mezclado con cualquier otro, potenciando la eficacia del tratamiento.

Puedes aprovechar sus propiedades sobre todo si tu piel es sensible o está congestionada, ya que calma, relaja, tonifica y promueve la generación celular, hidrata, mantiene la flexibilidad y evita el envejecimiento prematuro.
 
BUENA PARA TU PIEL Y PARA TU MENTE

Hay muchas formas de disfrutar de los beneficios del aceite esencial: con masaje, en el agua del baño, mediante vaporización y/o inhalación, para perfumar habitaciones, a través de compresas....

El uso del destilado de lavanda es una agradable alternativa para reducir el estrés. Basta verter unas pocas gotas en el agua para darse un baño reparador, o bien para lubricar un buen masaje en las cervicales o en la espalda.

Además inhalándolo, tu olfato se activará, actuando sobre el sistema nervioso y notarás como el aroma tiene una acción directa sobre tu ánimo.

En aromaterapia el aceite esencial de lavanda es excelente para tratar algunos trastornos como el insomnio, los mareos, el nerviosismo, la hipersensibilidad... Es un gran aliado si sufres depresiones o tienes tendencias a preocuparte por todo. También combate el mal humor y facilita la meditación o las practicas espirituales.