Las tendencias a nivel mundial que impactarán en la
alimentación durante el año 2018 apuntan a un crecimiento de los alimentos
saludables y sostenibles, según las tendencias rastreadas por el Observatorio
de Healthia Certification. Al respecto, dado que la mitad de los europeos sigue
algún tipo de dieta, una parte cada vez más importante de los consumidores
comienza a demandar ingredientes, productos y combinaciones de alimentos que
brinden beneficios físicos o emocionales.
1. El autocuidado gana posiciones
El frenético ritmo de vida actual, la conectividad constante
y la desconfianza generalizada hacia los sistemas regulatorios que hace servir
la industria agroalimentaria, han provocado que muchos consumidores se centren
en el «autocuidado» y prioricen el tiempo y los esfuerzos dedicados a sí
mismos. En el futuro cada vez más consumidores buscarán ingredientes, productos
y combinaciones de alimentos y bebidas que brinden beneficios nutricionales,
físicos o emocionales que mejoren sus prioridades de autocuidado. Por otra
parte, «la aversión a ingredientes específicos está aumentando a medida que más
ciudades, condados, estados y países aplican impuestos, requisitos de
etiquetado y otras estrategias para crear conciencia sobre los posibles efectos
nocivos sobre la salud del azúcar, la sal, las grasas saturadas y otros
ingredientes que pueden evitarse», señala este informe.
2. Pensar global, comer local
En muchos países existe la tendencia cada vez más acusada de
elaborar platos creados con ingredientes que se obtienen a poca distancia. Uno
de los personajes más representativos de este movimiento es el chef danés René
Redzepi, que hace justamente eso en su restaurante Noma de Copenhague,
designado en tres ocasiones como el mejor del mundo. Para muchos analistas, se
trata de una corriente que continúa ganando adeptos en cada vez más
restaurantes. La prueba es que el propio René Redzepi, el chef que con 25 años
desafió a los críticos gastronómicos al apostar por los productos locales, ha
querido que su nuevo restaurante Noma 2.0 esté rodeado de árboles y vegetación,
cuente con un huerto urbano y disponga de un invernadero en el tejado para
cultivar alimentos autóctonos.
3. Prosigue el boom de las proteínas vegetales y los postres
veganos
Se trate de granos enteros, brotes, semillas e incluso
algas, los principales observatorios de tendencias pronostican que las
proteínas animales seguirán cediendo protagonismo a las vegetales. Así lo
entiende, por ejemplo, el informe Pinterest sobre lo que comeremos y beberemos
en 2018. Según anota esta red social, las búsquedas de «proteínas vegetales»
aumentaron un 417% durante 2017. Otro tanto puede decirse de los postres
veganos, cuyas búsquedas crecieron en Pinterest un 329% el año pasado debido,
en parte, a la curiosidad que provoca el vegetarianismo y al hecho de que cada
vez más comensales busquen versiones veganas de sus postres favoritos.
4. Beber agua en la comida y la cena gana posiciones
Según detalló Nielsen en noviembre en el informe «La nueva
comanda», «es llamativo cómo los españoles vuelven a pedir agua cuando se
sientan en la barra o en la mesa del bar, hasta un 8% más». En cambio, las
bebidas alcohólicas permanecen estancadas, especialmente las de más alta
graduación. Algo similar detecta el equipo de BBC Good Food al anunciar como
una de las principales tendencias para el año 2018 las bebidas sin alcohol.
Según los datos facilitados por diversos supermercados británicos, las aguas
tónicas premium con sabores interesantes, los licores sin alcohol y las mezclas
botánicas (como, por ejemplo, de pomelo, limón, cardamomo, roble y especias
varias) están inundando el mercado para llenar un vacío.
5. Mesa para uno
Los gourmets solitarios comienzan a ser legión. Si hace unos
años abrió sus puertas en Amsterdam (Holanda) «Eenmaal», el primer restaurante
para personas que prefieren comer sin compañía y sumergirse en una desconexión
personal, ahora comienza a convertirse en práctica generalizada en otros
países. Según detalla Rob Collins, director general de la empresa Wairtrose
Limited, a medida que los consumidores están tomando el control, las
convenciones sociales están decayendo, hasta el punto de que ha dejado de ser
tabú cenar sin compañía.
6. Comida sana en lugar de «dietas»
Aunque la mitad de los europeos y norteamericanos siguen
algún tipo de dieta, lo que comienza a llevarse es tomar decisiones saludables,
indica Ross Anderson, jefe de cocina de la Escuela Waitrose Cookery de
Salisbury (Gran Bretaña). Así, mientras las dietas que excluyen alimentos están
perdiendo popularidad, la demanda de comida sana se sigue incrementando por
encima de los dos dígitos. En total, 7 de cada 10 compradores admiten sentirse
más felices cuando compran alimentos que saben que son saludables.
7. Más vegetales que nunca.
Según indica en su listado de pronósticos para el año 2018
Baum + Whiteman, una de las consultoras líderes en restauración, los alimentos
vegetales continuarán escalando posiciones. Para confirmarlo, he aquí los datos
que aporta en su informe: el 83% de los estadounidenses reconoce estar
incorporando más alimentos vegetales en su alimentación por motivos de salud,
mientras en el último año las búsquedas en Google de artículos relacionados con
el vegetarianismo han crecido un 90%. Según este informe, «los millennials y la
generación X están adoptando una alimentación eminentemente vegetal y…
probablemente, continuarán haciéndolo».
8. Comer con los ojos
De la mano de los millenials, durante el año 2018 continuará
la tendencia de «comer con los ojos». Según Mintel, el consumidor busca cada
vez más que la comida sea una experiencia sensorial. De ahí que demande
productos que involucren los cinco sentidos y apelen a lo visual, al aroma o la
textura. El objetivo, en ocasiones, no es otro que poder compartir su
experiencia de consumo en Instagram, Pinterest y otras redes sociales. Como
respuesta, algunos restaurantes están optando por incluir en sus platos más
ingredientes que aporten colores.
9. Transparencia 2.0
Según el informe anual que elabora la cadena estadounidense
de supermercados Whole Foods, especializada en alimentos orgánicos, los
consumidores quieren saber la historia real que se esconde detrás de su comida,
y el camino que recorre un producto desde su origen hasta la tienda. Los
consumidores buscan cada vez más, por ejemplo, señala Whole Foods, si un
producto es ecológico, si posee la certificación de comercio justo, así como si
el producto en cuestión tuvo en cuenta el bienestar animal. Cuanto más claro y
honesto es el alimento, mejor percibido es entre los consumidores.
10. Cartas de fusión
La creciente facilidad para conseguir ingredientes de
cualquier rincón del planeta está llevando a que la gastronomía sea cada vez
más mestiza. Al respecto, si durante el año 2017 triunfó la comida hawaiana,
para 2018 algunos observatorios de tendencias pronostican que aumentarán las
influencias culinarias procedentes de Oriente Medio. La otra gran influencia
durante 2018 será la cocina india y platos como las lentejas estofadas al
curry, los fideos de coco al cardamomo, el arroz con frutos secos al azafrán o
las croquetas de patata y bacalao al sésamo.
11. Nada se tira
El «trashcooking» o cocina de aprovechamiento (de cabo a
rabo), especialmente en verduras, pero también en pescados y carnes poco
cotizados, está poniendo a prueba los conocimientos y las técnicas de los
mejores chefs para sacar platos exquisitos en los que todo se aprovecha y nada
se tira. Esta forma de proceder cada vez cuenta con mayor respaldo no solo de
los consumidores, sino también de los pesos pesados de la alta cocina que
apuestan por el «from nose to tail» (por aprovechar los alimentos de cabo a
rabo).
12. Emerge «la cuarta comida»
«No se trata de glotonería, sino de adaptar nuestros horarios
de comidas a nuestras ocupadas vidas», indica el informe anual de Waitrose Food
& Drink 2017-18, un año después de que en su anterior estudio pronosticara
el auge del poke (una ensalada típica hawaiana), los yogures de hortalizas
(elaborados tras añadir verduras como la zanahoria, el pepino o la remolacha al
yogur de toda la vida), el agua de sandía y, en general, las comidas ligeras.
Ya sea un tentempié entre el desayuno y la comida o una merienda entre la
comida y la cena, el informe de Waitrose prevé que en 2018 muchos de nosotros
añadiremos una comida más a nuestra rutina diaria.