El hígado transforma las sustancias tóxicas (que suele acumularse por los excesos al comer) en inofensivas y luego las vierte a la sangre. Riñones, intestinos, pulmones y piel se encargan de expulsarlas.
Si la alimentación es muy rica en grasas saturadas, azúcares refinados y alimentos procesados puede producirse una acumulación excesiva de toxinas y los órganos depurativos no dan ‘’abasto’’.
En estos casos, el organismo se defiende provocando un malestar general y síntomas de intoxicación como dolor de cabeza, cansancio, erupciones cutáneas y sensación de estómago sucio.
-Cuando el gran depurador del organismo que es el hígado está sobrecargado es imposible encontrarse bien. Por eso es el momento de realizar una limpieza a fondo con una dieta sana, equilibrada, ligera y desintoxicante.
BASTAN DOS DÍAS DEPURATIVOS PARA VER RESULTADOS SIN PERDER LA SALUD
Conseguirás depurar tu hígado, te sentirás mucho más ligera y con más energía y enseguida notarás que has perdido volumen. Para ello es fundamental aumenta la producción de orina y evitar el estreñimiento.
EL SECRETO DE LA DEPURACIÓN
No bebas más agua de la que necesitas. Entre litro y medio y 2 litros al día son claves para diluir y eliminar las toxinas.
No sobrepases esa cantidad porque obligarías al riñón a trabajar mas de la cuenta. Y evita el café, el alcohol y el tabaco, que favorecen la acumulación de tóxicos.
Además, si empiezas el día con un vaso de agua en ayunas mejorará tu tránsito intestinal y mejorará la función del hígado.
Toma caldos de verduras, jugos recién exprimidos o licuados de frutas y hortalizas. Te ayuda a completar la ingesta de líquidos y si los preparas con vegetales que estimulen la micción el efecto depurativo se multiplica.
Prepara infusiones de plantas medicinales como manzanilla, diente de león, o anís. Son digestivas y limpian el cuerpo de toxinas. Puedes tomar hasta 5 vasos a lo largo del día con la mezcla de cualquiera de ellas. ,
ALIADOS QUE TE LIMPIAN
Vegetales especialmente diuréticos.
Todas las frutas y verduras tienen este efecto gracias a su contenido en potasio, pero hay algunas que, por las sustancias que contienen, favorecen todavía más el trabajo del hígado y del riñón. Así que durante estos días procura que no falten en tu despensa las que te recomendamos mas adelante.
Aliños depurativos. Unas alcachofas son todavía más depurativas si las aderezas con jugo de limón o perejil, que potencian este efecto. Por supuesto, evita la sal para no retener líquidos.
La fibra de los cereales. Si no vas bien al baño igualmente acumularás toxinas, por eso te conviene tomar pan y cereales integrales a diario.
Pescado blanco, pavo o tofu. Sus proteínas se digieren fácilmente.
Tómalos como plato principal.
INCLÚYELOS EN TUS DESAYUNOS
INFUSIÓN DEPURATIVA
Los dos días depurativos añade a tus desayunos un té verde o una infusión de diente de león.
JUGO DE APIO, MANZANA Y ZANAHORIA
Licua 1 manzana grande, 2 zanahorias y 2 ramas de apio y toma 1 jugo recién exprimido.
CALDO DE APIO Y CEBOLLA
Hierve 3 cebollas y una rama de apio en 2 litros de agua. Al tomarlo añade jugo de limón.
TOMA A LO LARGO DEL DÍA
-1 litro de agua
-1 cucharadita de manzanilla
-1 cucharadita de diente de león
Hay quien recomienda añadir la planta conocida como cola de caballo, pero mejor que seas cauta: si añades esa hierba y tomas, además, fármacos con efecto diurético pudes perder demasiado potasio.