Las plantas ayudan a prevenir infecciones

Las plantas medicinales no son maravillas de acción infalible, pero sí pueden suponer una valiosa ayuda que te evite las infecciones continuas o las gripes y resfriados que sufres con cada cambio de estación, tanto por variaciones de temperatura y humedad.


¿QUÉ HIERBAS TE CONVIENEN?

Con una prevención adecuada y un tratamiento suave puedes evitar la toma de un analgésico convencional, un antibiótico o un antiinflamatorio (que puede bloquear la capacidad defensiva de tu cuerpo). En cualquier caso, a menudo las hierbas evitan que el problema vaya a más.


Para prevenir el ataque de virus y bacterias, "sube" tus defensas recurriendo a plantas de acción linfática es decir, que estimulan la producción de glóbulos blancos.

La equinácea es la hierba "protectora" por excelencia, sobre todo para infecciones recurrentes o crónicas.
Toma: 1 cucharadita para 1 taza de agua, hervir. Tomar 5 tazas al dia.
     
Si ya te has resfriado, las hierbas de acción pectoral te ofrecen una alternativa inocua que en muchos casos te evitará tomar una medicación más fuerte y poco natural, e incluso tener que acudir al médico.

Una infusión bien caliente de saúco ó jengibre es de gran ayuda para combatir agresiones víricas y bacterianas.

Saúco: Toma 1 cucharadita para 2 tazas de agua, hervir por 10 min. Tomar 1 taza cada 8 h. Uso externo: 4 cucharadas de te por ½ litro de agua y hervir por 10 min en enjuagues para gargarismos

Jengibre: Toma 1 cucharada para 1 taza de agua, hervir durante 5 min. Tomar 1 taza cada   8 h.
 
CON MIEL DOBLE BENEFICIO
La mayoría de las plantas recomendadas pueden tomarse en forma de tisana, y si le añades miel el efecto se duplica: por un lado, mejoras la absorción de sus principios activos y por otro, resulta muy útil en el tratamiento de catarros e infecciones respiratorias. Además esta infusión no precisa que añadas azúcar.

Propiedades del Aloe Vera

El aloe vera restaura la piel hasta límites insospechados.
Éstas son algunas de sus principales virtudes.


Hidratante: aumenta la capacidad de la dermis para absorber el agua.

Calmante: ayuda a reforzar el sistema de defensa minimizando la posibilidad de irritación. Contiene componentes activos para detener el dolor y la inflamación, es ideal para pieles sensibles.

Cicatrizante: Aumenta el correcto entrelazado de las fibras de colágeno y ayuda a la regeneración celular.

Antiséptico y desinfectante: presenta una fuerte actividad antibacteriana.

Queratolìtico: Elimina la acumulación de células muertas en lugares determinados de la piel que dan lugar a durezas y callosidades.


Epitelizante: tiene un efecto que elimina las células muertas, proporcionando mayor luminosidad.

Aloe Vera, la solución para una piel radiante

UN REGENERADOR EXCEPCIONAL

Sus beneficios son indiscutibles desde hace siglos. Las reinas egipcias Nefertiti y Cleopatra lo consideraban el mejor  y más indispensable tratamiento de belleza por sus muchas propiedades, sobre todo por su acción regenerante.

Restaura la piel a nivel profunda gracias a los nutrientes naturales: los minerales, las vitaminas, los aminoácidos y las enzimas, que estimulan la producción de células nuevas.

Penetra en las tres capas de la piel (epidermis, dermis e hipodermis) y expulsa las bacterias.

Sus funciones cosméticas principales consisten en flexibilizar las fibras elásticas de las dermis, fortificar las de colágeno y estimular la reproducción de las células epiteliales (protectoras de los órganos) en el cuerpo.

Refuerza tu dieta con los nutrientes ideales


Es posible ganar la batalla contra los virus y las bacterias de este invierno potenciando en los menús de cada día los nutrientes "protectores".

DESDE HOY CONSUME MÁS:

-Vitamina A. Mantiene tus mucosas sin patógenos.
Toma más... zanahorias, espinacas, hígado y huevos.

-Vitamina C. Contribuye a prevenir los "fallos" en el sistema inmune. Ingerirla a diario aumenta el volumen en sangre de citoquinas compuestos ‘’anti-virales’’. Si eres de tendencia anémica, combínala con alimentos ricos en hierro para que tu cuerpo absorba mayor cantidad de este mineral y esté más fuerte.
La encuentras en... pimientos rojos, cítricos y verduras de hoja verde (coles, brócoli...)
   
-Vitamina E. Antioxidante que ayuda a reparar los daños causados por la edad por el sistema inmune.
 La aportan... el aceite de oliva, las pipas de girasol o los frutos secos.

 -Zinc. Realiza la misma función que la vitamina E y mejora la labor defensiva de los glóbulos blancos.
 Lo encuentras en... el marisco (sobre todo las ostras) y los cacahuates

-Fibra. Mejora el funcionamiento del tracto intestinal, lo que ayuda a luchar contra los gérmenes que desarrollan su  "labor" en el intestino.
Aumenta tu consumo de... verdura, frutas, legumbres y cereales.

-Proteínas. Las necesitas más que nunca por que las células de la sangre que protegen el organismo son, justamente, de naturaleza proteica.
Toma más... pescado azul, carne (mejor blanca) y leche desnatada.

Las tres reglas de ORO contra el estreñimiento


Este trastorno digestivo puede también ser fuente de una ansiedad que genere estreñimiento. Así puedes evitarlo.

Cuello y escote envidiables

La piel del cuerpo requiere grandes dosis de hidratación para conservarse elástica y joven más tiempo.

Pero antes de aplicarla, nada mejor que realizarse un masaje diario en seco con la ayuda de un guante de crin. Ésta es una excelente manera de eliminar las células muertas de la epidermis y estimular la circulación sanguínea.

Lo ideal es hacer el masaje exfoliante después del baño o la ducha, empezando desde los pies, pasando por las piernas, el vientre, las nalgas y la espalda, y hasta llegar al cuello, hombros, escote y senos describiendo círculos y evitando los pezones. Para terminar se frotan los brazos desde la puntas de los dedos hasta los hombros.

Aparte de este masaje, hay zonas que precisan más cuidados. En el caso del cuello, donde empiezan a aparecer muy pronto los signos de envejecimiento. Pero es importante hidratarlo a conciencia y, a partir de los 30-35 años, utiliza crema reafirmante facial.

En la piel de los senos tampoco debe bajarse la guardia. Y es que, pasados los 35 años, y sobre todo si se han tenido hijos y se les ha amamantado, ésta pierde tersura, se vuelve flácida y los pechos tienden a caer , para ello te recomendamos gel  reafirmante de cuello y busto.

Un cutis radiante

El primer paso para mantenerlo sano, luminoso y en buena forma es la limpieza. Realizarla a diario y en forma correcta elimina el maquillaje acumulado y la suciedad, además de evitar que se obturen las glándulas sebáceas, previniendo así la aparición de espinillas y puntos negros. Lo mejor es usar jabón de miel, pero para pieles grasas jabón de barro.

Después viene la hidratación, cuya principal misión es recuperar el agua que la epidermis pide, a la vez que ayuda a reestructurarla gracias a sus principios activos.


Para cutis seco: crema antiedad
Para cutis graso: crema de tomillo

Joven y Guapa con la dieta

VITAMINA A 

Repara el colágeno, suaviza las arrugas y ayuda al bronceado. Su carencia puede provocar sequedad dérmica, aspereza y la aparición de escamas. La puedes encontrar en el huevo, leche, hígado, zanahoria, albaricoque, tomate...

VITAMINA C       

Como la anterior, es una vitamina antioxidante que activa las defensas de la piel y la protege de las agresiones externas. Es imprescindible para formar el colágeno que confiere al cutis su firmeza y tersura. Cítricos, kiwi, fresa, pimiento, perejil... son buenas fuentes.

VITAMINA E

Es el mejor antioxidante para frenar la acción de los radicales libres, principales responsables del envejecimiento. También protege de los efectos de la contaminación y los rayos solares. Aceite de olivo y frutos secos la contienen en abundancia.


VITAMINAS DEL GRUPO B

Son esenciales para la producción de proteínas, responsables de la regeneración celular. La vitamina B, es imprescindible para un cutis terso, así como la B5 que también repercute en la belleza del pelo. Si falta la B3 (ácido fólico) pueden aparecer manchas oscuras.


HIERRO

Mineral indispensable para formación de hemoglobina, gracias a la cual la piel adquiere mejor tono. Su carencia puede provocar anemia, que se produce en una apariencia más blanca. Está en carnes, pescados, legumbres, verduras...

CINC

Participa, junto a la vitamina A, en la síntesis del colágeno, la regeneración del tejido cutáneo y proporciona elasticidad y tonicidad. Se halla en carnes rojas, pescados, leche, mariscos, cereales y nueces.

MAGNESIO

Previene el envejecimiento y estimula el recambio celular de la dermis. Frutos secos, legumbres y verduras de hoja verde lo contienen.